Alaska y los Pegamoides Otra dimensión

No podré volverte a ver nunca más,
sabes que lo siento de verdad.
Nunca debí haber cogido ese avión;
ahora estoy en otra dimensión.

Aquí perdido sin tu amor
entre humanoides de color.

Cuando sobrevolábamos Key Biscayne
sentí un mareo, una náusea, un no sé qué,

las azafatas corrían sin cesar,
el piloto lloraba en el bar.

Te dejo pues me vienen a buscar;
no sé a dónde me querrán llevar.
Ya despega la nave a propulsión;
te espero a las ocho en Plutón.