Silvio Rodríguez Casiopea

Como una gota fui de la marea
la playa me hizo grano de la
arena.

Fui punto en multitud por donde fui
nadie
me detectó y así aprendí.

Cuando creí colmada la
tarea
volví mi corazón a Casiopea.

Cumplí
celosamente nuestro plan:
por un millón de años esperar.

Hoy llevo el doble dando coordenadas
pero nadie
contesta mi llamada.

¿Qué puede haber pasado a mi
señal?
¿Será que me he quedado sin hogar?.

Hoy
sobrevivo apenas a mi suerte
lejano de mi estrella de mi
gente.

El trance me ha mostrado otra lección:
el
mundo propio siempre es el mejor.

Me voy debilitando
lentamente
Quizás ya no sea yo cuando me encuentren.